
¡Hola! Soy Mónica, habladora profesional (sin diploma, pero con mucha práctica), culo inquieto de nacimiento y fan declarada de los viajes bien organizados pero con margen para la sorpresa. Me encanta hacer planes con amigos, de vez en cuando me apunto a alguna fiesta, y si suena música de los 60’s a los 2000’s, probablemente sea yo la que está bailando como si no hubiera mañana.
Soy millennial y lo llevo con orgullo. Aún recuerdo lo que era viajar sin roaming gratis, usar cámaras compactas y hacer la maleta con un CD de mezclas de música. Pero oye, aquí sigo, actualizada, con blog de viajes y con ganas de ayudarte a que tú también disfrutes de cada aventura como se merece.
¿De dónde viene todo esto?
Mi primer gran viaje fue por la Costa Oeste de Estados Unidos, y allí me atraparon para siempre los paisajes de película, los pueblos perdidos, esas playas californianas enormes y la sensación constante de estar dentro de una escena de Hollywood. Me enamoré de la Ruta 66, de los moteles con encanto (y colibrís en la puerta, literalmente), y de la mezcla tan loca entre naturaleza, ciudades gigantescas y playa a lo “Vigilantes de la Playa”.
Desde entonces, no he parado. Siempre que puedo, hago las maletas y me lanzo a descubrir lugares nuevos, ya sea por España o por cualquier rincón del mundo. Acompañada eso sí, a veces sólo de marido guapo y otras (casi todas) también con mis dos niños.
¿Cómo viajo?
En mis viajes me gusta que haya un poco de todo. Naturaleza, comida rica, pueblos bonitos, alguna ciudad para pasear (y cotillear escaparates), algún plan alternativo, algo de playa si se puede… y si hay algo diferente y curioso, me lanzo de cabeza. No suelo ir a museos de cuadros y esculturas (salvo en Roma, que es otro rollo), pero me flipan los museos interactivos y sitios donde se pueden “toquetear” cosas.
Y por supuesto, no todo sale siempre perfecto. Como aquella vez que casi pierdo el pasaporte en un autobús de San Francisco y acabamos viendo una detención de película justo en la puerta de nuestro hotel. Pero oye, eso también es viajar. Reírte después. Tener anécdotas para contar en las cenas. Y aprender para la siguiente.
¿Por qué este blog?
Porque me encanta viajar, pero más aún me flipa organizarlo todo, buscar los sitios más chulos, diseñar rutas, apuntar cosas curiosas, probar sitios recomendados y, cuando vuelvo, me flipa contarlo con pelos y señales. No me enrollo con datos históricos que puedes encontrar en Wikipedia. Aquí vas a encontrar consejos reales, sitios que he probado, rutas prácticas, lo bueno, lo malo y lo que no te puedes perder, contados como si estuviéramos tomando un café.
Este blog está pensado para gente como tú: con ganas de ver mundo, pero sin perder tiempo en la parte pesada de la organización. Y si además te echo una mano a montar tu viaje o te doy ideas para la próxima escapada, yo tan feliz.
¿Qué vas a encontrar aquí?
- Consejos útiles y prácticos, cero paja.
- Rutas recomendadas.
- Planes variados: un poco de todo, como en mis viajes.
- Sitios donde comer, dormir, fliparlo o relajarte.
- Y, sobre todo, una forma de viajar cercana y con humor, natural y como si fuera tu amiga.
¿Te vienes?
Si tienes alguna duda, quieres una mano con tu próximo viaje o simplemente te apetece contarme el tuyo, escríbeme sin miedo. Me encantará ayudarte.
¡Nos vemos!